Enjuiciarán a nueve adolescentes por acosar a una estudiante hasta llevarla al suicidio

Phoebe Prince, una joven de 15 años, fue acosada y agredida durante tres meses por algunos compañeros del colegio hasta que no pudo aguantarlo más y se ahorcó en la escalera de su casa el 14 de enero pasado usando el pañuelo que le había regalado su hermana de 12 años por Navidad. Esta última fue también quien encontró el cadáver de Phoebe.

Comenzará un juicio en el estado de Massachusetts a los nueve adolescentes por “bullying”, término que denomina el acoso que pueden sufrir los menores por parte de otros jóvenes de su edad. Siete de ellos son chicas.

Seis de los acusados serán juzgados como adultos y, en caso de ser hallados culpables, podrían pasar el resto de su vida entre rejas. Se trata de la primera vez en Estados Unidos que la Fiscalía del Estado lleva adelante un caso de “bullying”.

Ellos tendrán que responder a acusaciones tales como persecución, vulneración de los derechos individuales con agresión física y violación de una menor de edad.

JURISPRUDENCIA EN ESTADOS UNIDOS

De este modo se sentaría jurisprudencia, puesto que en Estados Unidos no hay ningún tipo de ley o regulación para este tipo de casos.

“Lo que Phoebe tuvo que soportar va mucho más allá de la dimensión del acoso”, comentó por su parte la fiscal del distrito, Elizabeth Scheibel, pues la joven no sólo fue perseguida, insultada y humillada sino que también fue agredida físicamente. Los adolescentes le tiraban cosas y le mandaban mensajes de texto con amenazas.

Pero lo que muchos encuentran especialmente alarmante es que varios profesores y el personal del colegio supieran, presumiblemente, lo que estaba pasando, sin que nadie dijera nada.

Mientras tanto, varios de los acusados han sido expulsados de la escuela, aunque la mayoría de ellos hace pocos días, cuando las acusaciones se hicieron públicas.

Los responsables del colegio siguen desempeñando sus funciones y han rechazado categóricamente toda exigencia de dimisión.