Pesa menos que su hija
Rebecca Jones es una joven inglesa que, tras sufrir anorexia durante la mitad de su vida, pesa menos que su hija de tan sólo siete años. La mujer se alimenta a base de sopas, tostadas y bebidas energéticas, aunque los doctores le alertaron que la falta de nutrientes podría matarla.
Pesa 33 kilos, cinco más que su hija, a la que supera por
Su desorden alimenticio empezó a los once años con el divorcio de sus padres, por lo que engordó rápidamente hasta los 90 kilos y perdió la autoestima en el colegio.
A los 13 años declaró que dejaría de comer y, tras una drástica pérdida de peso, sus compañeros de clase empezaron a felicitarla por su nueva figura y su familia no se dio cuenta de la gravedad de su situación.
Cuando estuvo embarazada, los médicos le aconsejaron comer pollo por sus proteínas y tomar pastillas vitamínicas para ayudar a su bebé pero su estómago no estaba acostumbrado a ellas. "Mi novio intentó convencerme para comer más, pero mi estómago estaba tan acostumbrado a mínimas cantidades que la comida casera me hacía vomitar".
Al final consiguió sobrevivir con una dieta de pan y rábano durante su embarazo. Su hija Maisy nació sana, pero su madre no pudo generar leche para alimentarla. Después de romper con su pareja, Rebecca se alimentó de una dieta de líquidos que la hizo bajar de peso otra vez.
A principios de este año, un análisis de sangre reveló que Rebecca Jones tenía los niveles de potasio peligrosamente bajos, lo que se conoce como hypokalemia, que causa una debilitación extrema de los músculos. Ahora tiene sus niveles de potasio y su corazón monitorizados regularmente.
1 comentarios:
Siempre hay una causa: en este caso, el divorcio de sus padres.
Una víctima más.
Saludos
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